Un antiguo compañero de Montoya saca a la luz su verdadera cara tras las cámaras

Montoya volvió a acaparar la atención pública el pasado jueves cuando publicó un comunicado en el que explicaba su silencio tras participar en 'Supervivientes'. El andaluz explicó que su retirada de los medios responde a la necesidad de proteger su salud mental, un aspecto que comenzó a deteriorarse tras las vivencias recientes. "Pensaba que podía, pero las situaciones vividas en los últimos tiempos me han colapsado", reconoció Montoya.

"No pretendo gustar a todo el mundo ni ser el centro de un circo ni mucho menos ganar un premio, pero no todo vale", escribió Montoya en sus redes sociales. Además, describió el proceso por el que pasó de la esperanza al desasosiego: "la ilusión se trasformó en una pesadilla de esas que te atrapan y aún despierto sabes que el monstruo te sigue persiguiendo".

"La salud mental no es un juego y, gracias a tener un entorno sano que me ha puesto en manos de grandes profesionales. Estamos en ese camino para volver a seguir siendo feliz porque es lo que llevo buscando desde hace mucho", añadió. Además, anunció medidas legales para protegerse, ya que ha "contratado los servicios de un despacho de abogados" para defenderse "ante cualquier ataque a su honor, su intimidad y su propia imagen".

No obstante, a estas declaraciones les ha seguido una respuesta inesperada por parte de Daniel Oury, quien fue compañero de Montoya en 'El Conquistador'.  Se trata del reality de TVE grabado en República Dominicana, donde el sevillano inició su trayectoria televisiva hace ya dos años. Daniel Oury ha utilizado su cuenta de X para denunciar un comportamiento poco ético de Montoya, relatando un incidente ocurrido durante el viaje.

"El primer día que lo conocí, en un avión de camino a Dominicana para rodar 'El conquistador' de TVE, estuvo burlándose todo el camino de una persona con discapacidad que viajaba junto a él", afirmó con contundencia. Pero no se quedó ahí: "Lo que pasó en el programa ya ni os cuento…", dejó entrever que hubo más situaciones reprochables durante la convivencia.

Finalmente, Daniel Oury cuestionó la coherencia del mensaje emitido por Montoya. Especialmente su afirmación de que "jamás me alegré del mal ajeno", sugiriendo que la realidad podría ser muy distinta.