La confesión de Borja González sobre sus peores momentos no vistos en 'Supervivientes'

Hace ya un mes que Borja González se alzó como ganador de 'Supervivientes', consiguiendo los 200.000 euros de premio. Ahora, en un vídeo publicado en su canal de Mtmad, ha compartido cómo ha sido realmente su paso por el reality. Una experiencia que, según él, ha superado con creces sus expectativas en cuanto a dureza.

"Esta experiencia ha sido mucho más dura de lo que parecía, es duro a nivel de hambre, a nivel de energía. Mentalmente es durísimo porque es muy larga la experiencia. Al final son tres meses y medio, pero parece que sean dos años porque los días se hacen larguísimos,  por no hablar de los diluvios", relató Borja González.

"Yo he sido militar ocho años y me he tragado lluvias en la montaña, pero es diferente. Cuando era militar tenía un sitio en el que refugiarme y en 'Supervivientes' no teníamos nada y no se acababa nunca el agua.  Ha sido una tortura", añadía.

Sin embargo, si algo le ha pasado verdadera factura, ha sido estar tanto tiempo aislado de los suyos: "Lo que peor he llevado ha sido la incomunicación, me mataba por dentro no saber nada de los míos. De no saber de Ana ni cómo estaba llevando el estar sola con el bebé. Es mucho tiempo, le puede pasar algo a cualquier familia o a cualquier amigo.  El hambre, al final, se pasaba muy mal, pero era llevadero. Notaba que no tenía energía, pero nada que ver con la incomunicación".

"La pregunta que más me habéis hecho sin duda es si iría a otro reality. ¡Dejadme descansar un poquito por favor! Vengo del reality más duro de la televisión, tres meses y medio perdido en una isla, ¿y ya me estáis preguntando por el siguiente?. Bueno, no lo descarto, pero que sea algo de no pasar hambre, algo de cocina, de baile, algo diferente", decía, entre bromas, sobre su futuro.

También se ha pronunciado sobre un posible fichaje de su pareja, Ana López: "La pregunta sobre si apoyaría a Ana para ir a 'Supervivientes' también me la habéis hecho mucho. A mí me gustaría mucho que fuera, me encantaría verla ahí, pero dice que ni de coña".

"La única forma que tengo de ir es que Borja me dijera que no tengo cojones", respondía ella. Con una sonrisa, Borja González remató: "Una semana le doy. Me tenéis que ayudar a picarla a ver si el año que viene la vemos en Honduras, aunque lo veo complicado la verdad".