El nuevo reto al que se enfrenta Damián Quintero justo después de 'Supervivientes'

Tras su aventura en 'Supervivientes', Damián Quintero ha cambiado los Cayos Cochinos por una nueva rutina que combina sudor, sacrificio... y un poco de humor. A solo un mes de abandonar el reality, el karateka ya está inmerso en un nuevo reto profesional que lo devuelve a su terreno natural: la alta competición.

Pese a que en las últimas semanas ha aprovechado para celebrar su 41 cumpleaños y reencontrarse con los suyos, Damián Quintero no ha dejado que el verano le sirva de excusa. El desgaste físico tras casi cien días en Honduras, donde perdió más de seis kilos, pasando de 78 a 71,9, ha sido evidente. Sin embargo, él mismo lo ha dejado claro: "comienza la pretemporada", y con ella, su firme intención de volver a lo más alto.

Para lograrlo, se ha puesto en manos del preparador físico Antonio Expósito, a quien ha presentado en redes sociales con gran ironía como "el causante de mis dolores". Y no es para menos, ya que el objetivo es ambicioso y el tiempo, limitado. A pesar del conocido "efecto rebote" tras abandonar 'Supervivientes',  Damián Quintero quiere llegar en plena forma a sus próximos compromisos deportivos.

Durante estos días, Damián Quintero combina entrenamientos intensivos con momentos de desconexión en la playa. "¡Qué duro es entrenar en la playa! Prefiero cuidar el fuego", ha comentado con su habitual sentido del humor. Un respiro merecido tras las duras pruebas de resistencia que vivió en televisión, pero sin perder de vista su propósito: recuperar el estado físico que lo llevó a ser uno de los referentes mundiales en kata.

El regreso de Damián Quintero al tatami es inminente. Subcampeón olímpico en Tokio 2020, doble campeón del mundo y trece veces campeón de Europa, Damián Quintero quiere que su nombre vuelva a sonar en el circuito internacional. De hecho, ya ha confirmado que pronto compartirá más detalles sobre sus nuevos objetivos, pero ha dado algunas pistas sobre el exigente plan que está siguiendo para volver a competir. Porque si algo ha demostrado el malagueño, es que no sabe estar quieto.